La formación la estamos realizando en el Altiplano boliviano a 3800 metros sobre el nivel del mar, con unos parajes que parecen de ensueño, el Lago Titicaca es una de esas maravillas y los colores de las alfalfas, avenas, arvejas y quínoas rojas lo enriquecen más aún. Las condiciones climáticas son duras; frio, viento y altas temperaturas, a pesar de todo ello es una zona ganadera. Los ganaderos en esta zona son relativamente nuevos, casi 20 años en esta actividad, son pequeños cuentan entre 5 a 20 vacas en producción, y producen 14-20 litros de leche diarios promedio por vaca.
La formación se está realizando en las instalaciones de la Unidad Académica Campesina de Batallas en donde se forman los hijos de productores y campesinos de las comunidades del Altiplano.
Llegaron 28 ganaderos de distintas comunidades de La Paz y Oruro, entre ellos muchas mujeres. Las mujeres ocupan un importante rol en la producción del ganado, manejan el pastoreo, el ordeño, la producción de derivados, entre otras actividades.
Este primer día era desafiante para Agriterra, principalmente por el testeo de la metodología, por el temor que los ganaderos no pudieran escribir y entrar en confianza rápidamente. Habíamos pensado en distintas estrategias en caso que no nos resultará lo que habíamos preparado, sin embargo, desafiamos a los pequeños ganaderos a participar, abrirse y poder compartir sus experiencias en manejo de registros. Los ganaderos respondieron muy bien a este desafío, la técnica de deshilo al inicio del taller (El saludo) gatillo entrar en confianza y soltarse un poco. A sí mismo, apoyó a la apertura la formación de grupos para trabajar en el rescate de saberes.
Trabajamos en la sensibilización a través del análisis participativo respondiendo a 4 preguntas: ¿Para que registramos? ¿qué debemos registrar en nuestra granja? ¿ cómo lo estamos haciendo? ¿ cuáles son las dificultades para registrar? Respondiendo a estas 4 preguntas los ganaderos mostraron todos sus conocimientos y se pusieron de acuerdo en cómo presentarlas en plenario. Los 4 grupos tuvieron respuestas similares, los ganaderos reconocen la importancia de registrar para saber cuánto ganan, para poder comparar la producción, saben que información es relevante de registrar. Realmente los ganaderos dieron una catedra a nivel técnico, sin embargo, solo tienen registros mentales, de repente escriben en cuadernos o en calendarios, argumentan no tener tiempo, no tener los instrumentos y no tener conocimientos de cómo llevar registros. Para emprendedores el registro mental no va acorde a una gestión empresarial moderna.
En este día también jugaron al juego X/Y (metodología CEFE) en donde 3 empresas compiten para poder tener ganancias. La comunicación, la confianza, el sentido de cooperación y competencia son la base del juego. A su vez, se espera que comprendieran que los ganaderos no son rivales entre si, sino colegas que unidos pueden poder lograr mejores resultados, bueno ese era el aprendizaje, sin embargo, la realidad fue otra. Se apreció que no existe confianza y no se generaron estrategias para generar confianza y cooperación entre las empresas, al contrario hubo un clima de desconfianza y de traición. Hubo un fuerte individualismo que impidio la cooperación. Muy raro cuando pensamos que también son miembros de organizaciones de productores.
Al final del día, al momento de la evaluación todos estaban de acuerdo que es importante registrar y quieren aprender cómo hacerlo. A su vez concluyeron que la comunicación es la base para generar confianza y cooperación.
Mañana 24 de abril se trabajará en el llenado de registros y en los conceptos básicos de costos, puntos de equilibrio, estados de ganancias y pérdidas a través de un juego muy entretenido, aprender haciendo es la clave.
